Etiqueta de navegación

Etiqueta de navegación

La navegación como ocio ha existido durante siglos, y como medio de transporte desde los inicios de la historia humana. Por ello, no es de extrañar que el ser humano haya desarrollado muchas tradiciones relacionadas con esta actividad. Hay demasiadas costumbres curiosas, términos raros y normas extrañas como para enumerarlas todas aquí, y la mayoría no son relevantes para el negocio del alquiler de embarcaciones. Sólo nos ocuparemos de dos actividades principales; el adelantamiento y el anclaje, porque tienen que ver con la interacción con otros usuarios de embarcaciones. La etiqueta de navegación relacionada con el adelantamiento y el anclaje debe tomarse en cuenta siempre, para garantizar el disfrute recíproco de todos en el agua.

En primer lugar, al adelantar a otra embarcación, siempre se debe reducir la velocidad para no crear una estela espantosa. Adelantar a gran velocidad no sólo puede molestar a otros usuarios de una embarcación, sino también afectar sus cenas, bebidas o juegos. Incluso al ser adelantado por otra embarcación más grande, a veces hay que reducir la velocidad. Además, al adelantar a un barco de vela, asegúrate de bloquear su viento lo menos posible. En cuanto al anclaje, siempre hay que acercarse lentamente al lugar de anclaje para no molestar a las personas a bordo de otros barcos anclados que estén presentes. Hay que anclar con cortesía. A diferencia de los coches aparcados ordenadamente uno al lado del otro, los barcos y yates anclados pivotan alrededor del ancla y ocupan grandes círculos centrados en sus anclas. En cualquier lugar en el que estos círculos se superpongan, existe el riesgo de colisión. Por lo tanto, asegúrate de saber lo que estás haciendo. También debes pensar en la cantidad de ruido, humo y olor que piensas producir, y bajar el ancla a una distancia adecuada de otras embarcaciones.